Controla tus porciones
A pesar de que sean alimentos saludables, necesitas controlar el tamaño de la porción ya que aunque el pollo es un buen alimento, si te comes dos kilos, no verás buenos resultados.
Por ejemplo, una forma de medir las porciones es extender tu palma de la mano, es el tamaño de la proteína, puño cerrado sería el tamaño del carbohidrato almidonado, las ensaladas si son vegetales crudos, ahí puedes si comer bastante cantidad.
Además, debes medir bien los aderezos ya que algunos tienen bastantes calorías. Por ejemplo, la mostaza es muy baja en calorías y una cucharada de oliva tiene 140 calorías.
Haz que dormir y el descanso sea una prioridad
Dormir es tan importante como cuidar lo que comes y hacer ejercicio, si duermes menos de 7 horas tu cuerpo se estresa y hay más ansiedad por comer, además de que el cortisol se eleva y existe más acumulación de grasa. El descanso influye en el funcionamiento correcto de nuestro metabolismo, hasta el punto de que hay personas que aun comiendo bien no logran perder peso por no dormir bien las horas necesarias.
¡Recuerda que un descanso de calidad hará que afrontes el día con mucha más energía y vitalidad!
Entrena para perder grasa
Emplea un método metabólico que lo saque de control y haga que liberes más hormona de crecimiento y se movilice más grasa, ¿Cómo hacerlo? ¡Entrena pesado e intenso! Así tu cuerpo libera hormonas y tu cuerpo se vuelve en una máquina quemagrasa que libera más testosterona y ayuda a mejorar tu metabolismo. Entrena con conexión mente músculo, visualiza tu músculo trabajando y así verás muy buenos resultados a largo plazo.
Los estudios han demostrado que el entrenamiento con fuerza ayuda a perder igual o más peso que el ejercicio aeróbico.
Incluye ejercicios compuestos en cada entrenamiento
Esto permitirá usar varios músculos al mismo tiempo, así integrando varios grupos musculares en un único movimiento, ayudando así a aprovechar mejor nuestro tiempo y permiten desarrollar la musculatura de una manera más uniforme. Algunos ejercicios compuestos son: sentadilla, peso muerto, press de banca, press de hombros, dominadas. Recomendando a los principiantes comenzar con pocas series y pesos reducidos, pero con más repeticiones y poco a poco incrementar peso.
Justifica tus carbohidratos
Revisa la calidad y cantidad de los carbohidratos que consumes, si no los necesitas durante las siguientes horas, trata de consumir grasas, proteínas y vegetales. Si consumes carbohidratos, trata de no consumir grasa ya que ambos son fuentes de energía, elige uno u otro. Siempre cuestiona tu nivel de actividad y con base a ello decide si los necesitas consumir o no.
Minimiza al máximo los alimentos procesados
Que el 90% de tu alimentación venga de un solo ingrediente y naturales, una manzana, huevo, pollo, lentejas, es decir que no sean alimentos ya modificados por el hombre. Recuerda que los alimentos procesados, al estar llenos de sabor resultan muy atractivos para nosotros. Lo que no nos preguntamos es por qué tienen tanto sabor. Sencillamente porque están cargados de grasas saturadas, azúcar y de ingredientes artificiales que son los que les otorgan esa cualidad.
La grasa se pierde con grasa
Elige las grasas buenas y controla la cantidad, ya que en poquita cantidad hay bastantes calorías, por ejemplo una porción de grasa, es una cucharadita de aceite de oliva, de coco, un puñado de almendras, pistachos, aguacate, semillas, cacahuates, pescado azul, etc. Comer grasa no nos hace engordar, sino que por el contrario, puede ayudarnos a adelgazar si escogemos las alternativas adecuadas.
No te tomes las calorías
Evita los jugos, bebidas energizantes, tés endulzados, etc., ahí se consumen bastantes y no nos damos cuenta, por ejemplo un jugo de naranja, equivale aproximadamente a 45 gr de azúcar. Tomar bebidas altas en calorías es una de las maneras más difíciles de sabotear tu dieta. Para llenarte más rápido y hacer de la dieta un camino más placentero, procura que las calorías que consumas provengan de alimentos sólidos. ¡Toma agua cristalina y pura!
En definitiva, saber cómo perder grasa conlleva todo un cambio de perspectiva y actitud que traerá los cambios. Eso es lo difícil, pero una vez que te convenzas, implementes los nuevos hábitos y veas los beneficios, te resultará más sencillo mantenerte. Se trata de tu salud y bienestar.
¡Recuerda que lo más importante es la constancia!
Con solo 10 o 15 minutos intensos, puedes perder grasa entrenando a tope y hacerlo diariamente sin excusas.
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