La pérdida de peso para personas mayores de 30 años puede ser un gran desafío. ¿Por qué? Porque a esta edad aprendemos a incrementar nuestro metabolismo para mantener nuestro cuerpo saludable, lo cual era muy fácil a los 20s y ahora es necesario esforzarse más.
A los 30s tal vez ya tienes hijos y una vida laboral ocupada, lo cual dificulta las actividades para perder peso, pero no significa que sea imposible. Lo único que necesitamos es trabajar inteligentemente y organizarnos.
Los hábitos que aprendas ahora, serán hábitos que llevarás a los 40,50s y más. ¿No sería extraordinario continuar realizando las actividades físicas que nos gustan por mucho tiempo?
Mantener un cuerpo lo más activo posible para quemar más calorías durante todo el día. Eliminar hábitos que drenan tu cuerpo y causa inactividad, además de alimentarse con comida real que promueva la energía y el vigor.
Son hábitos muy sencillos que los podemos llevar a donde quiera que vayamos.
Tomar suficiente agua
Cuando estás deshidratado, tus niveles de energía bajan o respondemos a estas señales de sed comiendo. ¡Así que bebamos agua! Tener una botella bonita donde se nos antoje tomar agua, será de gran ayuda, preferentemente de cristal ya que el agua conserva mejor sus propiedades.
Practicar una buena postura
La forma en que nos sentamos o estamos de pie, tiene un gran impacto a nivel confianza. Si haces algunos ejercicios de postura cada mañana y a la mitad del día o en la noche, te dará una columna vertebral sana que te mantenga así por muchos años.
Cuida la cafeína que consumes
Una alta dosis de cafeína puede proporcionarte una explosión rápida de energía. Pero si bebes demasiada, puedes terminar con más deshidratación y cansancio. Si consumes cafeína por la noche, puede interferir con tu sueño.
Dejar de comer en exceso durante el desayuno
Antes se pensaba que el desayuno estimulaba el metabolismo. Los expertos ahora saben que la comida de la mañana no tiene ningún poder mágico para cambiar la cantidad de calorías que quemas durante el día. Así que no consumas tanta comida dejándote una sensación de pereza y lentitud. En su lugar, come un desayuno con porciones controladas con proteína que estimulen tus músculos, carbohidratos saludables y fibra.
Cuenta tus pasos diarios
Usa un monitor de actividad para verificar la cantidad de pasos que das todos los días. Cada paso que das quema calorías. Así que verifica ese número con regularidad y haz un plan para subir el nivel con frecuencia. Comienza con un plan de 7000 pasos por día, luego aumenta a 10 000 o más.
Utiliza los datos a tu favor
Utilizar una aplicación que te ayude a monitorear tu actividad física, proporciona datos importantes que pueden ayudarte a aumentar tu metabolismo. El rastreador de movimiento por ahora es especialmente útil. Ve cuanto se mueve en diferentes momentos a lo largo del día y señala los momentos típicos en los que tiendes a ser menos activo. Luego, mezcla tu rutina para moverte más en esos momentos. Por ejemplo, la tarde es un momento en el que estamos inactivos, así que podemos programar una caminata o clase de gimnasio para convertir esa caída de energía en un aumento de metabolismo.
Aumenta tu metabolismo en el trabajo
Realiza cambios para quemar calorías en la oficina. Mueve el bote de basura para que tengas que levantarte de tu silla para alcanzarlo. Realiza reuniones con compañeros cuando se pueda en los pasillos o incluso en salas que estén alejados de tu oficina para caminar.
Empieza tus mañanas con un estiramiento
Conviértete en tu prioridad por la mañana. Tómate 10 o 15 minutos para estirarte y moverte después de levantarte de la cama. Este tiempo especial a solas contigo, te prepara para una perspectiva más positiva durante el día. Cuando tu cuerpo y tu mente se sienten mejor, es más fácil afrontar el día con energía.
Mezcla tu rutina
El ejercicio es absolutamente esencial para un metabolismo saludable. Pero no es necesario que hagamos ejercicio todos los días para quemar mega calorías. De hecho, hacer ejercicio en exceso puede dañar tu metabolismo. No es probable que te mantengas activo si estás agotado o lesionado, recuerda agregar días fáciles en tu rutina para la recuperación.
Construye músculo
Probablemente el paso más importante que puede tomar para aumentar la pérdida de peso a partir de los 30s es desarrollar músculo. Tener más músculo no solo ayuda a aumentar el metabolismo, sino a tener un cuerpo delgado y firme. Programa al menos 2-3 entrenamientos de fuerza cada semana para estar más fuerte y en forma.
Planifica mini entrenamientos.
Si tu rutina diaria te tiene muy ocupado para asistir a un gimnasio o grupo de entrenamiento, puedes en tu casa suscribirte a un programa en línea o encontrar videos en youtube que se adecuen a tus tiempos y necesidades. ¡No hay excusas!
Y lo más importante
¡Busca ayuda!
Muchas personas de 30 años se sienten obligadas a dedicar la mayor parte o totalidad de su tiempo a su familia y carreras. Pero este también es un momento en el que aprende hábitos que lo preparan para una vida de bienestar. Así que no tengas miedo en buscar ayuda. Pídele a tu pareja o algún familiar o amigo que te cuide a tus hijos durante una hora para hacer tu rutina. Organiza caminatas familiares o salidas donde practiquen actividad física. Pedir ayuda no solo ayuda tu metabolismo, tal vez enriquezca tus relaciones interpersonales.
Recuerda que no importa la edad y peso que tengas ahora, entre más rápido incorpores hábitos saludables, prepararás tu metabolismo para sanerte y vivir tus mejores años con el estilo de vida que a ti te gusta.
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